IMSS
Desde el 2000, cada 29 de septiembre se conmemora el Día Mundial del Corazón. Esto con la finalidad de generar conciencia entre las personas sobre las enfermedades cardiovasculares, así como su prevención, control y tratamiento.
Actualmente, las enfermedades cardiovasculares están consideradas como la principal causa de mortalidad a nivel mundial. De hecho, se reporta que los accidentes cerebro vasculares y los infartos al miocardio, son causales de más de 17 millones de fallecimientos cada año.
Debido a lo anterior, Gabriela Borrayo Sánchez, coordinadora de Innovación en Salud del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), destacó que “entre los tres y seis años es la mejor edad para fomentar la salud cardiovascular. Esto a través de una alimentación saludable, ejercicio y manejo de emociones que contribuyan a la prevención de enfermedades del corazón en la vida adulta”.
La doctora indicó que, si no es posible inculcar estos hábitos durante la infancia, otra edad recomendada para cambiar a un estilo de vida saludable está entre los 25 y 50 años. Algunos de los factores a modificar para prevenir afectaciones cardiacas serían: exceso de peso, alimentación que lleve a dislipidemia (concentración alta de grasas en la sangre), sedentarismo, tabaquismo y uso de drogas.
Esto a través de la recomendación de siete pasos que las personas pueden realizar cada día:
El instituto destaca que la obesidad y el sobrepeso están entre los principales factores de riesgo para desarrollar hipertensión arterial. Este padecimiento está presente en uno de cada tres mexicanos mayores de 20 años y en el 50 % de los casos que llegan a tener un infarto del corazón.
“El corazón es el motor de nuestra vida, que nutre a todos los órganos y sistemas”, comentó la Dra. Borrayo Sánchez.
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Debido a lo anterior, el IMSS cuenta con la estrategia “A Todo Corazón”. La cual cuenta con siete acciones principales que se otorgan a los pacientes y que van desde la prevención de enfermedades cardiovasculares, hasta la rehabilitación en caso de que ya hayan superado un infarto. La especialista del IMSS remarcó que esos siete componentes son de “Código Infarto”, un Protocolo de Atención Integral a través del que se ha podido salvar más de cinco mil vidas de pacientes con afecciones graves del corazón.
“Lo que hace es agilizar todas las acciones para establecer el diagnóstico en menos de 10 minutos; identificar síntomas como dolor de pecho, falta de aire y desmayo, que tengamos en nuestros servicios de urgencias la designación de una cama y proceder al tratamiento. Hoy tenemos Redes de Atención de Código Infarto en prácticamente en todo el país”. Agregó la Dra. Borrayo.
De acuerdo con la especialista, en esta intervención se aplica un medicamento para disolver el coagulo o trombo que provoca el infarto. O se lleva al paciente a una sala de “hemodinamia” para abrir la arteria obstruida y colocar una malla o stent, para salvar la función cardiaca.
“En un año típico, previo a la pandemia por COVID-19, el Seguro Social otorga más de 19 millones de consultas subsecuentes por enfermedades del corazón, atiende más de 800 mil urgencias y egresa a casi 100 mil personas”. Y agregó que el IMSS realizan tanto acciones preventivas como trasplantes de corazón.