Estados Unidos
Haití
Desde hace unos meses, la violencia en Haití se ha incrementado, por lo que el gobierno de Estados Unidos solicitó urgentemente a sus ciudadanos que se encuentren en dicho país caribeño a salir de allí “mientras todavía existan disponibilidad de vuelos comerciales”.
A través de un comunicado, la Embajada de Estados Unidos en Haití, informó que el Departamento de Estado norteamericano hizo la recomendación para que los civiles de EE. UU. se retiren de Haití ante los constantes brotes de violencia.
Además, remarcaron que las personas deben tomar en cuenta minuciosamente los riesgos o posibles afectaciones que puedan ocurrir al quedarse o ingresar a aquel país. Lo anterior debido al incremento en la violencia, así como también a los retos actuales en materia de infraestructura.
En caso de que los ciudadanos norteamericanos decidan viajar hacia Haití, o permanecer en el país, la Embajada de EE. UU. declaró que, en caso de que los vuelos comerciales dejen de operar, las probabilidades de proporcionar ayuda a las personas serán, básicamente escasas. Por ello la insistencia a abandonar Haití mientras aún haya vuelos comerciales internacionales.
En el comunicado, el Departamento de Estado norteamericano, detalló que en Haití existe una notable escasez de combustibles, la cual podría afectar los servicios sustantivos en caso de ocurrir alguna emergencia. Esto también afectaría el acceso operaciones financieras (bancos), atención médica de urgencia, acceso a señales de Internet o telecomunicaciones. Y, por supuesto, limitaría el funcionamiento y disponibilidad de servicios de transporte público y privado.
La violencia en Haití no ha dado descanso a sus ciudadanos. El país caribeño ha pasado por diversas crisis sociales y desastres naturales; además, el alto índice de pobreza y la falta de apoyos a las personas, ha incrementado la violencia generalizada en diferentes regiones del país.
Sin embargo, uno de los puntos climáticos fue el asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moïse en julio pasado. El crímen ocurrió a manos de un grupo armado que irrumpió durante la noche a la privacidad de su hogar en Puerto Príncipe. Ahora, se han formado grupos armados que han tomado el control de la capital haitiana, provocando inseguridad (múltiples secuestros), temor y crisis social. Además, estos grupos se han encargado de realizar bloqueos carreteros en donde suelen interceptar y atacar a numerosos transportistas.
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Hace unos días, Todd Robinson, subsecretario de Estado para la Lucha contra el Narcotráfico, se reunió con Ariel Henry, primer ministro de Haití. Entre las conversaciones, Robinson se mostró dispuesto a donar 200 equipos de seguridad para la protección de la policía haitiana. Así como también se comprometió a donar 60 vehículos sin especificar sus características.
A pesar del apoyo en especie, el subsecretario norteamericano dejó en claro que su país no participará activamente para solucionar los conflictos en Haití. “No será la comunidad internacional la rescate a Haití. Serán los propios haitianos, las autoridades de Haití y la policía, quienes serán responsables de la seguridad en el país”. Externó el funcionario estadounidense.