Israel
México
Hace unos días, el diplomático y economista, Andrés Issac Roemer Slomianski, confirmó que el Gobierno de Israel le concedió la libertad, tras considerarlo “una persona no peligrosa”. Por lo que, a partir de ahora, el también comunicador podrá continuar su proceso legal bajo los términos de la prisión domiciliaria.
El diplomático está señalado por múltiples mujeres por delitos de índole sexual, como acoso, hostigamiento y abuso sexual. De acuerdo con la organización Periodistas Unidas Mexicanas, son alrededor de 60 las mujeres denunciantes que comenzaron a revelar lo que les ocurrió cuanto estaban en compañía de Roemer, tildándolo incluso de “depredador sexual”. Entre sus víctimas, a quienes agredía bajo un mismo modus operandi, se encontraban empresarias, reporteras, actrices, modelos, cantantes, bailarinas, y más.
Luego de que en 2021 se destapó el patrón de conducta y los actos ilícitos cometidos en contra de decenas de mujeres por parte del diplomático, éste salió del país y viajó hacia Israel. Sin embargo, en octubre del año pasado, el gobierno de dicho país logró detener al diplomático a petición de México con la intención de extradición para que rinda cuentas por los cinco casos, ocurridos en la Ciudad de México, por los que se le acusa de agresión sexual. No obstante, menos de tres meses después de su captura, Israel determino dar prisión domiciliaria al exdiplomático, quien aguardará el desarrollo del proceso de extradición solicitado por México.
“En contra de las estadísticas más robustas, salí de la cárcel. Parece ser el primer caso de arresto domiciliario en mi circunstancia”. Comentó Roemer en su cuenta de “X”.
Además, indicó que el Gobierno israelí “descubrió mil falacias mexicanas” y que, tras una evaluación minuciosa, determinaron que no se trata de una persona peligrosa. Y resaltó que “la política sigue estando por encima de la justicia”.
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El también presentador de televisión agregó que, durante su estancia en prisión, se dedicó a escribir las líneas de lo que se convertirá en su próximo libro, el cual llevará por nombre “La verdad ya no importa”.
Ahora, el exembajador de México ante la UNESCO, deberá permanecer en prisión domiciliaria hasta que se solucione su extradición.