Las autoridades de India denunciaron este martes que al menos 20 de sus soldados murieron en un enfrentamiento registrado con tropas chinas en la frontera de la región de Cachemira.
El ejército indio había hablado inicialmente de tres fallecidos, pero luego señalaron que algunos de los heridos murieron, elevando el balance a 20.
El gobierno indio, además, indicó que “ambas partes sufrieron bajas”, si bien las autoridades chinas no reportaron víctimas.
Se trata de las primeras muertes registradas en más de cuatro décadas del enquistado conflicto en la frontera compartida entre ambos países, conocida como la Línea de Control Actual (LAC, en inglés).
Ambos gobiernos se acusaron mutuamente de lo ocurrido.
Según el gobierno indio, el conflicto se produjo en la noche del lunes en el valle Galwan, situado en la región de Aksai Chin, que forma parte de la frontera occidental común.
Las autoridades indias señalaron que se “produjo un enfrentamiento violento como resultado de un intento de la parte china de cambiar el statu quo de forma unilateral en la zona”.
La Cancillería india culpa a China de incumplir con el acuerdo logrado la semana anterior respecto a la LAC en el valle Galwan.
Pekín, por su parte, acusó a India de cruzar la frontera hacia el lado chino.
El portavoz de la Cancillería china, Zhao Lijian, aseguró que las fuerzas indias cruzaron la línea limítrofe de facto en dos ocasiones el lunes, “provocando y atacando al personal chino, lo que resultó en una grave confrontación física entre las fuerzas fronterizas”.
“Nuestras tropas fronterizas mantuvieron una reunión de alto nivel y llegaron al consenso de relajar la situación en la frontera, pero sorprendentemente el 15 de junio las tropas indias violaron nuestro consenso”, dijo Zhao.
Hu Xijing, editor jefe del medio oficial Global Times, señaló en Twitter que las fuerzas armadas chinas habían sufrido “bajas” en este último enfrentamiento, si bien no está claro si se refería a muertos o heridos.
En el conflicto, las tropas chinas e indias se enfrentaron con barras de hierro y piedras, según informó la agencia Reuters citando a funcionarios indios.
Las fuerzas militares indias aseguraron que no se produjo ningún disparo.
La LAC es en realidad una línea de demarcación muy ambigua, pues la presencia de ríos, lagos y montañas nevadas hace que esa frontera de facto varíe.
Los soldados en ambas partes de la frontera, que representan a dos de los mayores ejércitos del mundo, se topan cara a cara en muchos puntos de esa línea de demarcación.
Las tensiones en la zona se han ido acrecentando en las últimas semanas pese al compromiso por el diálogo manifestado por ambos tras la escaramuza de mayo.
El mes pasado, decenas de soldados chinos e indios se enfrentaron físicamente en un punto de la frontera del estado noreste de Sikkim.
Hay varias razones que explican por qué las tensiones están volviendo a elevarse ahora, pero sin duda los objetivos estratégicos de ambos son la raíz del problema. Y en este punto vuelve a haber acusaciones cruzadas.
India ha construido una nueva carretera, en lo que los expertos consideran que es el área más remota y vulnerable de la LAC en Ladakh.