CDMX
Crimen
En un giro impactante en el caso del violento ataque contra la influencer Valentina Gilabert, las autoridades de la Ciudad de México detuvieron a Aintzane Ichazo Nucamendi, una de las mejores amigas de la víctima, bajo sospecha de complicidad en el crimen. El arresto se produjo el pasado fin de semana, junto con el de otra persona cuya identidad aún no ha sido revelada, según confirmaron fuentes cercanas a la investigación.
El incidente, que conmocionó a la comunidad en línea y a la opinión pública, ocurrió cuando Marianne Gonzaga Rodríguez, presunta agresora, apuñaló a Gilabert en 15 ocasiones dentro de un departamento en la Ciudad de México. Aintzane Ichazo, quien aparentemente sostenía una relación cercana con la víctima, ahora enfrenta cargos por no intervenir durante el ataque. Lo cual, de acuerdo con la Fiscalía de la CDMX, la sitúa como presunta cómplice.
Las detenciones se llevaron a cabo tras surgir detalles alarmantes sobre el caso. Según el abogado de Gilabert, Ayrton Becerril, en el momento del ataque había tres personas más en el lugar: el novio de la víctima, su amiga Aintzane Ichazo y otro individuo no identificado. No obstante, ninguno de ellos actuó para detener la agresión.
“El novio de Valentina salió a comprar cervezas, mientras que Aintzane y otra persona permanecieron en el departamento. Fue entonces cuando Marianne Gonzaga Rodríguez entró y llevó a cabo el ataque”, externó Becerril.
La implicación de Aintzane Ichazo en el caso generó controversia, principalmente tras filtrarse un audio en donde se escucha a testigos afirmar que ella no hizo nada para ayudar a Gilabert durante el ataque. En la grabación, se escucha a una voz decir: “Aintzane no hizo nada, no llamó a nadie. Si no actuó, entonces es cómplice. Marianne la amenazó con un cuchillo y le dijo: ‘Si gritas o dices algo, te mato'”.
Asimismo, el periodista Gustavo Adolfo Infante reveló que Marianne Gonzaga, quien vivió previamente en el mismo edificio, aún tenía acceso al departamento a través de un sistema de seguridad con huella digital. “Conocía el acceso y el lugar, por lo que pudo entrar sin problemas”, explicó el comunicador.
Ahora, las autoridades enfrentan el desafío de esclarecer el grado de participación de Aintzane Ichazo y la otra persona detenida. A ambas las presentarán ante el Ministerio Público en los próximos días, donde se espera que se revelen más detalles sobre su posible complicidad en el ataque.
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Mientras tanto, el caso desató un debate sobre la responsabilidad de quienes presencian actos de violencia y no actúan para detenerlos. Para Valentina Gilabert, quien sigue recuperándose de las heridas, la traición de una amiga cercana podría ser tan dolorosa como las cicatrices físicas que le dejó el ataque.