Crimen organizado
Narcotráfico
El caso de Rafael Caro Quintero ha dado un inesperado giro. Y es que se confirmó que un juez federar concedió la suspensión definitiva contra la orden de aprehensión con fines de extradición a EE. UU. Lo cual impide que el gobierno estadounidense reclame al también conocido como el “Narco de Narcos” para cumplir su condena en dicho país. Esto por el asesinato del agente de la Drug Enforcement Administration (DEA), Enrique “Kiki” Camarena.
Hace unos días, la Fiscalía General de la República (FGR) impugnó la suspensión de plano que detendría la extradición del famoso capo mexicano. Caro Quintero se hizo de renombre al fundar el Cartel de Guadalajara en 1978 en compañía de Miguel Ángel Félix Gallardo y Ernesto Fonseca Carrillo.
La solicitud de la fiscalía se presentó ante el Juzgado Primero de Distrito en Materias de Amparo y Juicios Federales en el Estado de México. Sin embargo, este martes la jueza Abigail Ocampo Álvarez, titular de dicho juzgado, otorgó la suspensión que favorece a Caro Quintero. Pues no podrá ser requerido por el gobierno estadounidense como se contemplaba originalmente.
La FGR aún tiene la facultad de impugnar la decisión del juez que concedió la no extradición para Caro Quintero. De ocurrir, será cuestión de un tribunal colegiado quien se encargará de determinar si el fallo se confirma, ratifica o revoca.
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Caro Quintero, de 69 años, en algún momento hizo alarde de su poder económico al ofrecer pagar la deuda externa de México a cambio de su libertad. Ahora se encuentra nuevamente tras las rejas en el penal federal del Altiplano en el Estado de México.
Su reciente aprehensión ocurrió el 15 de julio en el Guachochi, Chihuahua, a través de un operativo de la Secretaría de Marina de México. Su captura obedece a las dos órdenes de aprehensión en contra del narcotraficante, una de éstas con petición de extradición a Estados Unidos.
Rafael Caro Quintero era considerado uno de los fugitivos más buscados por el FBI. Incluso dicha Institución ofrecía una cuantiosa recompensa de 20 millones de dólares por información que condujera a la captura del capo mexicano.