La Organización Internacional del Trabajo (OIT) informó que en México 44% del empleo total tiene un alto riesgo de verse afectado por la pandemia; es decir, unos 24 millones de trabajadores que podrían experimentar una disminución en horas o salario; incluso, advierte que la tasa de desempleo podría llegar este año a 11.7% de la población económicamente activa, equivalente a seis millones de personas.
Al presentar la nota técnica “México y la crisis de la Covid-19 en el mundo del trabajo: respuestas y desafíos”, la OIT señaló que en cinco meses se han destruido más empleos formales que los que fueron creados en todo el 2019, y detalla que las consecuencias de la crisis se sintieron sobre todo a partir del mes de abril afectando un mercado laboral ya debilitado por brechas en materia de acceso y calidad del empleo”.
Asimismo, destacó que México tardó seis años para empezar a recuperarse de la crisis de 2008-2009 en términos de empleo formal e informal; no obstante, considera que, en el 2020, frente a la pandemia especialistas internacionales y nacionales concuerdan que es muy probable que la economía mexicana sea fuertemente afectada, con una importante repercusión en el empleo.
Entre marzo y abril del 2020, 12 millones de personas se añadieron a los rangos de la inactividad y la tasa de participación se redujo en 12.3 puntos porcentuales; es decir, no contaron con un empleo y con un ingreso.
Durante la cuarentena para frenar el Covid-19 la ocupación informal (en sector informal y sector formal) descendió hasta un 47.7% lo que supone una baja histórica, causada no por la formalización sino por una importante pérdida de trabajos informales.
A pesar de que hay aumento progresivo en la actividad económica a partir de junio y con ello un retorno a espacios de trabajo, aún no ocurre una recuperación integral del empleo y persisten desafíos. “Estos efectos podrían empeorar en el mediano plazo”, apuntó.