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Como cada año, en diversos países, incluido México, celebran el “Miércoles de ceniza”, conmemoración cuyos orígenes surgen de la religión judía. Para este 2024 se llevará a cabo este 14 de febrero, coincidiendo con el Día del Amor y de la Amistad. Con esta acción, la iglesia católica marca el inicio de la Cuaresma, periodo de 40 días previo al ‘Domingo de ramos’. Día en que comienza la Semana Santa, hasta el ‘Domingo de resurrección’. De acuerdo con la fe católica, la Cuaresma es el periodo de 40 días en que Jesús viajó por el desierto sin probar alimento.
Durante el ‘Miércoles de ceniza’, miles de fieles acuden a las iglesias para recibir la imposición de ceniza. La cual se traza en forma de cruz en la frente del feligrés. Y simboliza la mortalidad y la penitencia por los pecados.
Como mencionamos antes, cada año se celebra el ‘Domingo de ramos’ para conmemorar la llegada de Jesús a Jerusalén. Y marca el punto de inicio de la Semana Santa, que comprende la pasión, muerte y resurrección de Jesús.
Ese domingo, las iglesias bendicen las palmas. Mismas que se conservan hasta el año próximo para ser quemadas y mezcladas con agua bendita como símbolo del arrepentimiento de los pecados. Adicionalmente, las parroquias suelen quemar algunas imágenes religiosas que ya estén desgastadas para fusionar esas cenizas con las de las palmas benditas. De esta manera, se consigue la tradicional “ceniza” que se emplea el ‘Miércoles de ceniza’ para dibujar el símbolo de la cruz en la frente de los feligreses.
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La acción de recibir la ceniza simboliza la “humildad, arrepentimiento y compromiso de reconciliación”. Lo anterior debido a que representa la mortalidad y lo transitorio de la vida humana. Asimismo, para los fieles, representa una oportunidad para reflexionar sobre su vida, los pecados y metas. Así como para formar un compromiso con la intención de mejorar como personas durante la Cuaresma.
A partir del ‘Miércoles de Ceniza’, los feligreses también llevan a cabo otras tradiciones. Por ejemplo, evitar la carne roja en ciertos días de la semana, principalmente los viernes de la Cuaresma. Abstenerse de carne es una forma de representar la privación voluntaria de algo que nos gusta como forma de sacrificio.