MADRID — El Atlético Madrid ha hecho oficial el fichaje de Luis Suarez para las dos próximas temporadas.
Después de varios días de negociaciones, el internacional uruguayo llegó a un acuerdo para rescindir su contrato con el Barcelona, pero a cambio el Atlético ha aceptado incluir una serie de bonus que pagará al conjunto catalán si se cumplen una serie de requisitos.
El Atleti da así carpetazo a un culebrón que ha monopolizado la actualidad del mundo del futbol en los últimos días y Diego Simeone consigue al sustituto de un Álvaro Morata, que el martes completó su retorno a la Juventus de Turín.
El lunes por la mañana, Luis Suárez tenía apalabrada su salida del Barça de forma gratuita y su fichaje por el club colchonero parecía una cuestión de horas. Sin embargo, antes de la firma final, el presidente del Barcelona, Josep María Bartomeu se echó atrás ante las dudas de reforzar a un rival directo.
El Barcelona había confeccionado una lista de equipos a los que Suárez no podía ir gratis y un principio el Atleti no estaba en dicha lista.
Así, los abogados de Luis Suárez y Bartomeu se reunieron el martes por la noche con carácter de urgencia para llegar a una solución que terminó con el uruguayo rebajándose al 50% la ficha que todavía le quedaba por cobrar del último año de contrato. A cambio, el Barcelona facilita al uruguayo la carta de libertad para poder firmar por el Atleti, que sólo se hará cargo de las variables de la operación por objetivos.
Luis Suárez, de 33 años, es el tercer máximo goleador de la historia blaugrana. Llega al Atlético de Madrid con la misión de recuperar el gol que le falta a los colchoneros en las últimas temporadas y las conversaciones con Simeone han sido clave. Su llegada supone la marcha de Morata que, según ambas instituciones, se va cedido un año a la Juventus a cambio de 10 millones de euros.
A partir del primer año hay dos opciones para la Juventus. La primera es poder quedarse a Morata en propiedad al final de la campaña 2020/21. En ese caso la Juve tendría que pagar 45 millones de euros en tres plazos. La segunda opción es prorrogar la cesión un segundo año. En ese caso, se abonarían otros 10 millones de euros y, si al término de la temporada 2021/22 los italianos se quieren quedar al delantero colchonero, tendrían que abonar 35 millones (que se añadirían a los 10 + 10 que ha habría abonado previamente por los dos años de cesión).