Agresión sexual
Francia
Gérard Depardieu
Durante su primer testimonio ante un tribunal de París, donde se le juzga por violencia sexual, el actor francés, Gérard Depardieu, de 76 años, negó manosear o agredir sexualmente a mujeres durante el rodaje de Les Volets Verts, en 2021. El caso, que captó la atención internacional, representa uno de los procesos judiciales más significativos en Francia desde el surgimiento del movimiento #MeToo, en 2017.
“¿Por qué perdería el tiempo manoseando a una mujer, su trasero o sus pechos? No soy un degenerado”, declaró Depardieu. “Hay vicios que no conozco, no soy así”, agregó.
El actor, protagonista de más de 200 películas y ganador del Globo de Oro como “Mejor actor” por la película Matrimonio de conveniencia, enfrenta acusaciones de dos mujeres que trabajaron con él en Les Volets Verts (2021), dirigida por Jean Becker. Amélie, una decoradora de 54 años, lo acusa de inmovilizarla entre sus piernas y tocarla de forma inapropiada mientras le decía obscenidades. Otra denunciante, “Sarah”, asistente de dirección de 34 años, afirma que Depardieu la manoseó dos veces durante la producción.
“No soy un sobón de metro”, declaró el histrión.
Durante su declaración, Gérard Depardieu describió el ambiente tenso del rodaje aquel 10 de septiembre de 2021. “Era viernes, hacía calor y humedad. Pesaba 150 kilos, estaba de mal humor”, relató. Sobre su interacción con Amélie, admitió haberle agarrado las caderas, pero insistió que sólo fue “para no resbalar”.
La versión de la denunciante es radicalmente distinta. Según su testimonio, el actor no simplemente la tocó de manera agresiva, sino que también le hizo comentarios sexualmente explícitos, incluyendo que podía “hacer que las mujeres se vinieran sin tocarlas”.
Cuando el tribunal le preguntó sobre su lenguaje vulgar, Depardieu respondió con irritación: “¿Qué es sucio? ¿Decir ‘concha’? Lo digo todo el tiempo, ¡incluso a mí mismo!”.
El actor, conocido por papeles icónicos como el de Cyrano de Bergerac (1990), no ocultó su desdén hacia el movimiento #MeToo, al que responsabilizó por su situación legal. “Este movimiento se convertirá en un terror”, advirtió antes de regresar a su asiento.
El juicio, originalmente programado para octubre, se pospuso después de que Depardieu alegó problemas de salud, incluyendo secuelas de una operación cardíaca y diabetes agravada por el estrés. Las sesiones actuales están limitadas a seis horas diarias, con pausas obligatorias para que el actor descanse y se alimente.
Más allá de este caso, al menos una veintena de mujeres acusaron a Depardieu de conducta sexual inapropiada a lo largo de los años. Aunque la mayoría de las denuncias se archivaron por prescripción. Entre éstas, está la de la actriz Charlotte Arnould, cuyo caso por violación sigue bajo investigación.
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En octubre de 2023, Depardieu publicó una carta en Le Figaro defendiendo su inocencia: “Nunca abusé de una mujer”. Pero el tribunal de París deberá ahora determinar si sus acciones en el set de Les Volets Verts fueron, como alegan las acusadoras, agresiones sexuales o, como él sostiene, malentendidos sacados de contexto. El veredicto, que podría llegar este miércoles, decidirá el futuro legal del actor y marcará un precedente sobre cómo Francia aborda las acusaciones de abuso en la era post #MeToo.