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Este viernes, un ataque con misiles impactó la ciudad de Kramatorsk, ubicada a las orillas del río Kazennyi Torets, dentro de la región de Donetsk, al este de Ucrania. El bombardeo fue presuntamente dirigido por las tropas del gobierno de Vladimir Putin, no obstante, el Ministerio de Defensa ruso se manifestó en contra de dicha acusación, tal como también se deslindaron de la matanza de Bucha, donde Ucrania y Estados Unidos reportaron decenas de cadáveres de civiles que permanecían varados de las calles de la ciudad.
“Las declaraciones de los representantes del régimen nacionalista de Kiev sobre el supuesto ataque con cohete son completamente falsas”.
Ministerio de Defensa de Rusia.
Los proyectiles cayeron sobre una estación de trenes, dejando, por lo menos, 50 personas fallecidas y más de 100 heridos de diversa gravedad. Esto se suma a los miles de personas que han decidido abandonar sus viviendas para escapar de la guerra de Rusia y Ucrania. Tan solo hasta hace unas semanas, se tenía reporte de que más de 335 mil refugiados de Donetsk y Lugansk se han movilizado hacia territorio de Rusia desde que inició la guerra aquél 24 de febrero de 2022.
De acuerdo con información de autoridades locales, el misil que cayó en la estación de trenes es de fabricación ucraniana, un Tochka-U, diferente al Iskander ruso, tal como lo describe el medio español Donbass Media en redes sociales.
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Tras el ataque, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski calificó el ataque como “maldad sin límites”. Justo en el momento del impacto, decenas de habitantes de Kramatorsk acudían a la estación de trenes con la intención de desplazarse fuera de la zona de conflicto.
“Como no tienen fuerza ni valor para enfrentarse a nosotros en el campo de batalla, destruyen cínicamente a la población civil. Es una maldad sin límites. Y si no se castiga, no cesará jamás”. Sentenció Volodímir Zelensky a través de su cuenta de Telegram.
Por su parte, Oleksander Kamyshin, dirigente de la compañía de trenes de Ucrania, afirmó vía Telegram, que se trató de “un ataque deliverdado, donde decenas de personas fallecieron y muchas más permanecen en calidad de heridos”.
Aunque los primeros reportes señalaban que, por lo menos se contabilizaron a 30 fallecidos, los servicios de emergencias y rescate actualizaron la información elevando la cifra a, por lo menos, 50 decesos. El ataque también destruyó propiedades cercanas, así como múltiples vehículos que quedaron severamente dañados por el impacto.
Vía Twitter, el español, Josep Borrell Fontelles, quien funge como Alto representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, condenó “enérgicamente” el ataque de este viernes en contra de la estación de trenes en la ciudad de Kramatorsk. “Este es un intento más de cerrar las rutas de escape para quienes huyen de esta guerra injustificada y causante del sufrimiento humano”. Aseveró.