CDMX
Fiscalía
Metro
El pasado 7 de enero de 2023, una unidad del Transporte Colectivo Metro CDMX se impactó con otro tren entre las estaciones Potrero y La Raza, de la Línea 3. Tras el accidente, múltiples personas resultaron heridas, mientras que una joven estudiante, identificada como Yaretzi Adriana, perdió la vida.
Tras el incidente, el secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, señaló que se abriría una línea de investigación para determinar las causas del choque. Así como también para deslindar responsabilidades en el caso.
Días después, la Fiscalía General de Justicia, determinó vincular a proceso a Carlos Alfredo “N”, el chofer del Metro CDMX que conducía la unidad ese día. Al trabajador se le acusa por provocar lesiones a decenas de usuarios del metro, así como por homicidio culposo debido al fallecimiento de la joven Yaretzi Adriana Hernández Fragoso, de 18 años, quien estudiaba Artes Visuales en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
A través de un breve comunicado, la Fiscalía capitalina indicó que, mediante las evidencias proporcionadas, se logró que un juez de control vinculara a proceso al conductor del Metro CDMX, Carlos Alfredo “N”. Asimismo, indicaron que se cuenta con seis meses para el cierre de la investigación.
Ulises Lara, vocero de la fiscalía capitalina, afirmó que el chofer del metro fue detenido tras determinar que no respetó las medidas de seguridad propias del Servicio de Transporte Colectivo. Es decir, no reaccionó o maniobró para evitar el choque. Lo cual resultó en el impacto de dos trenes entre las estaciones Potrero y La Raza, de la Línea 3.
También te puede interesar: Guardia Nacional vigilará el Metro de la Ciudad de México
De igual manera, el funcionario destacó que fueron dos causas las que provocaron el aparatoso accidente. Una de éstas fue por la quema y corte dolosos de cables de dos registros de la estación Potrero. La otra, asegura, se debió a la “conducción negligente” por parte del detenido, quien presuntamente no habría mantenido las medidas de seguridad.
Esto último debido a que, según las indagatorias, el chofer habría rebasado los 30 kilómetros por hora, velocidad marcada como el “modo de seguridad” para que el operador pueda maniobrar o responder ante una situación para evitar algún tipo de accidente a la distancia prudente.
Por su parte, el Servicio de Transporte Colectivo Metro, solicitó que el chofer acusado pague un total de 260 millones de pesos. Esto por concepto de reparación de los daños provocados en las instalaciones del Metro. Dicha cifra no contempla las lesiones a los usuarios.