Julian Assange, fundador de Wikileaks, dio positivo a COVID-19

Desde hace poco más de tres años, Julian Assange se encuentra recluido en la prisión de Belmarsh, en el Reino Unido.

Este lunes, Stella Assange, esposa de Julian Assange, reveló que el periodista y activista de origen austriaco, dio positivo a COVID-19. El contagio se detectó al interior de la prisión Belmarsh, ubicada en Thamesmead, al sureste de Londres, en Inglaterra.

De acuerdo con declaratorias de la esposa del fundador de Wikileaks, a Julian Assange le detectaron COVID-19 el pasado sábado 8 de octubre. Mismo día en el que un gran número de simpatizantes se manifestaron para declararle su apoyo. Ellos acudieron al parlamento de Gran Bretaña para organizar una cadena humana en dicha sede política para solicitar la liberación de Assange, quien permanece desde el 2019 en la prisión de Belmarsh.

En redes sociales, Stella Assange resaltó que los directivos de la prisión encerraron al activista en una celda en aislamiento las 24 horas del día, “hasta nuevo aviso”.

Hasta el momento, las autoridades británicas no han dado actualizaciones sobre el estado de salud del prisionero Julian Assange. Se espera que próximamente haya una declaración oficial.

También te puede interesar: CDMX anuncia jornada masiva de vacunación contra COVID-19

El fundador de Wikileaks podría alcanzar una condena de 175 años

Aunque desde 2012, Julian Assange se mantenía bajo “asilo político” en la embajada de Ecuador, en Londres, Inglaterra, unos años más tarde, en abril 2019, le sería retirado el apoyo del gobierno de dicho país. Incluso se le revocó la nacionalidad ecuatoriana. En ese entonces, el gobierno de Ecuador permitió el ingreso de las autoridades inglesas a su embajada para detener al también activista.

Para julio de 2022 informó sobre la firma de extradición de Julian Assange a territorio estadounidense, quienes previamente habían solicitado al Reino Unido la extradición de Assange. Aunque el periodista apeló la decisión de extradición, todo indica que sí podría llevarse a cabo su llegada a Estados Unidos, donde las autoridades de aquel país podrían condenarlo a una pena de hasta 175 años por el delito de espionaje.

En 2010, Julian Asssange, a través de Wikileaks, filtró más de 700 mil documentos secretos relacionados con las actividades militares del gobierno de Estados Unidos. Principalmente, en operaciones llevadas a cabo en Afganistan e Irak.