Cámara de Diputados
Cuauhtémoc Blanco
Morelos
Con una votación contundente, el Pleno de la Cámara de Diputados resolvió desechar la solicitud de desafuero en contra del legislador federal Cuauhtémoc Blanco Bravo, de 52 años. Lo anterior tras considerar “notoriamente improcedente” el procedimiento iniciado en su contra por presunta tentativa de violación.
La decisión, respaldada por 291 votos a favor, 158 en contra y 12 abstenciones, mantiene al exfutbolista y exgobernador de Morelos bajo la protección de su inmunidad parlamentaria, al menos por ahora.
El fallo llegó después de que la Sección Instructora de la Cámara determinó que la petición de la Fiscalía de Morelos presentaba inconsistencias procesales. No obstante, el debate en el hemiciclo expuso profundas divisiones: mientras Morena, el PVEM y el PRI respaldaron la decisión de archivar el caso, el PAN, Movimiento Ciudadano y el PT exigieron que Blanco enfrentara la justicia sin privilegios políticos.
La sesión no estuvo exenta de polémica. El diputado panista, Germán Martínez, presentó una moción suspensiva en la que acusó a la mayoría de “revictimizar” a la denunciante al proteger a Blanco. “Este es un pacto patriarcal que silencia a las mujeres”, declaró ante el pleno, en un discurso que resonó entre colectivos feministas presentes en las galerías.
Por su parte, legisladores de Morena defendieron el fallo bajo el argumento de que el proceso adolecía de vicios legales. Sin embargo, la votación reveló fisuras al interior del partido: 24 de sus miembros apoyaron desechar el desafuero, mientras que 12 optaron por la abstención.
Blanco enfrenta una denuncia interpuesta desde octubre de 2024 por su media hermana, Nidia Fabiola Blanco, quien lo acusa de intento de violación en diciembre de 2023, cuando aún era gobernador de Morelos. De acuerdo con la víctima, durante meses la presionaron para no denunciar, y sólo lo hizo luego de que Blanco dejó el cargo.
Organizaciones feministas señalaron que el diputado buscó activamente un escaño en el Congreso para blindarse legalmente. “El fuero no debe ser un escudo para delitos graves cometidos fuera del ejercicio legislativo”, afirmaron en un comunicado conjunto colectivos como Nosotras Observamos y la Coalición contra el Tráfico de Mujeres y Niñas.
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Aunque la Cámara cerró esta puerta, la Fiscalía de Morelos podría presentar una nueva solicitud si corrige los errores señalados. Mientras tanto, el caso sigue alimentando el debate sobre la impunidad y los límites del fuero constitucional.
Para Blanco, la resolución representa un respiro; pero no el final del escándalo. La presión social y mediática persiste, y su nombre sigue ligado a uno de los casos más incómodos para la clase política de México.