Accidente
Fiscalía CDMX
Iztapalapa
Tras una semana de la explosión de una pipa de gas que ya suma 21 víctimas fatales y decenas de heridos en la alcaldía Iztapalapa, las autoridades de la Ciudad de México intensifican las investigaciones y despliegan esfuerzos para brindar acompañamiento jurídico, psicológico y económico a las víctimas y sus familias.
La tragedia, ocurrida el pasado 10 de septiembre bajo el Puente de la Concordia, reveló fallas críticas en el transporte de materiales peligrosos. Y expuso la vulnerabilidad de las zonas densamente pobladas de la capital.
La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, liderada por Bertha Alcalde Luján, implementó un operativo integral para atender a los afectados. Entre las medidas destacan la habilitación de la línea telefónica 55-4609-4432, disponible las 24 horas. Y un módulo presencial en la calle Dr. Río de la Loza 156, Piso 5, en la colonia Doctores, donde ofrecen asistencia legal, psicológica y social. Adicionalmente, instalaron unidades móviles del Ministerio Público en cuatro hospitales para agilizar la recolección de testimonios y evitar traslados innecesarios a las víctimas. Éstas últimas están en:
“Estamos cerca de cada víctima y cada familiar; nuestro objetivo es garantizar que reciban apoyo legal, psicológico y social desde el primer día, sin dejar a nadie desatendido”. Declaró la fiscal.
De acuerdo con los avances en las indagatorias, la pipa de gas LP, propiedad de la empresa Transportadora Silza, provenía de Tuxpan, Veracruz, y se dirigía a una gasera en Tláhuac. Al incorporarse a la autopista México-Puebla, el conductor perdió el control en una curva con pendiente positiva, impactándose en dos ocasiones contra los muros de contención. El volcamiento del vehículo provocó una fractura de aproximadamente 40 centímetros en el contenedor, liberando una nube de gas que se expandió en un radio de 180 metros antes de detonar en una explosión masiva.
Las pericias técnicas señalan que el exceso de velocidad fue un factor determinante en el accidente. La pipa circulaba a aproximadamente 50 kilómetros por hora en una zona donde el límite es de 40. El conductor, Fernando Soto Munguía, falleció una semana después del incidente a causa de las graves quemaduras sufridas. No obstante, la fiscal Alcalde Luján enfatizó que su muerte no detendrá las investigaciones, ya que se analizan las condiciones operativas y de normatividad de la empresa responsable.
“Nuestro objetivo es establecer con claridad qué responsabilidad corresponde a cada uno de los actores relacionados con este terrible incidente. Entre otros aspectos, se investigan las condiciones operativas y el cumplimiento de la normatividad por parte de la empresa. Con base en estos elementos, impulsaremos un proceso penal en el que se priorice la reparación integral del daño para las víctimas”. Informó Bertha Alcalde.
La empresa Transportadora Silza, filial del Grupo Tomza, ha comparecido ante el Ministerio Público y manifestado su disposición para colaborar con la investigación y aportar recursos económicos adicionales a las cuatro pólizas de seguro con las que cuenta. La fiscal destacó que el objetivo prioritario es garantizar una reparación integral del daño, que incluye compensaciones por afectaciones personales, materiales y psicológicas.
“No se trata sólo de cumplir con seguros o recursos económicos; se trata de acompañar a las víctimas y garantizar que su reparación sea completa y efectiva”. Subrayó Alcalde Luján durante una conferencia de prensa junto a la jefa de Gobierno, Clara Brugada.
Entre los aspectos más urgentes está la identificación de dos víctimas aún no reconocidas:
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Las autoridades solicitaron la colaboración ciudadana para identificar a estas personas mediante fotoboletines y la línea 55-5345-5080.
Hasta el momento, 27 personas permanecen hospitalizadas, 15 de ellas en estado grave, mientras que 36 ya recibieron el alta, y 21 personas perdieron la vida. Entre los casos más críticos se encuentra el de una niña de dos años, Jaclyn Azulet, quien fue trasladada a un hospital especializado en Texas para recibir tratamiento intensivo.